30.11.2003

Hoy 30 de noviembre nació mi madre. En 2003 era domingo. Recuerdo que hablé contigo mientras iba o volvía del salón de belleza. Hablaba todo el día con mi amiga, la del cine, la que hacía menos de dos meses se había convertido en mi compañera inseparable, en mi "amiga de la vida", Anita. En la noche te apareciste en mi casa, con unos lentes de contacto grises que me parecieron lo más raro del mundo y con Andrés Santana, tu querido primo -cuasi hermano, admirable, inteligente, joven. Ese día, sin electricidad como es costumbre en mi país celebramos el cumpleaños, bajo la mirada esceptica de mi madre.

29.11.2003

Lo interesante fue tu reacción. Mientras te informaba que no iba sola al cine, si no que iba con una amiga y un amigo.

Más interesante fue tu calma cuando llegué con una amiga, con un amigo y con la Mamá de mi amiga. Así que mi temor de que estuvieramos solos acabándonos de encontrar el día anterior y con la creciente tensión de amor que se respiraba después de las estrellas de esa noche, de esas canciones que cantaste (no sabía que lo hacías) de esa génesis de amistades, de esa conversación en el teléfono hasta no sé que hora y de ese "Me Gustas Cuando Callas" temprano en la mañana en mi celular. Que exquísito y que miedo!!

La noche pasó de prisa, las risas, los amigos, la película...y te quedaste conmigo largo rato en mi casa, ante la mirada inconforme de mi madre. Descubrimos que nuestros cumpleaños eran el 18 de julio. Me tentaste...dije que no. Quise congelar ese instante y repetirlo, repetirlo, repetirlo...

Amigos - 1 Agosto 1998

Antes que todo, fuimos a amigos. Antes que los corazones se entregarán los cerebros se conectaron. Hablamos de muchas cosas, coincidimos en casi todas, nos compartimos poemas, los tuyos más bonitos que los míos. Yo inconscientemente queriendo que fueran para mí y tú conscientemente queriendo que fueran para mí.

Entonces Comenzó Todo

La necesidad de escribir me despertó a pesar de acostarme tarde. Como dije antes, noviembre me cambia la vida y ya le temo a este mes.

Realmente no recuerdo que pasó el 27 de noviembre de hace un par de años, era jueves, fue un día normal en el que no sabía que cupido me seguía los pasos. Del 28 de noviembre recuerdo casi todo, salvo excepciones. Recuerdo lo hermoso del día, recuerdo la prisa del trabajo porque llegaba el primer barco, recuerdo incluso conversaciones triviales, recuerdo los pasteles en hoja que me regalaron y que no probé, recuerdo que iba vestida de azul y recuerdo todas y cada una de las estrellas de esa noche y todas las sensaciones que me invadieron sin permiso.

Pero lo que mas recuerdo no debió durar 5 minutos y marcó mi destino. Un instante mas, un instante menos y no te encuentro ahí. Me enloquece ahora pensar que si hubiera tomado otra ruta, que si hubiera salido mas temprano, que si hubiera entrado por otro lado, no te hubiera visto. Pero nada de esto pasó, tomé la ruta mas directa hacia tus brazos. Te encontré en la acera, con tu libro de Linux y tu mirada enigmática. Entonces comenzó todo.

"Noviembre siempre me trastorna la vida" llega este pensamiento a mi mente mientras trato de buscar una coincidencia, un ciclo, una explicación a todo... entiendo, obviamente, porque inventamos a Dios, necesitamos razones o excusas que nos sirvan de consolación y que nos garanticen que la vida es algo más, algo menos perecedero, algo más eterno. Preferimos pensar que hay un destino, cristianos, musulmanes, agnósticos y ateos, no importa...nos aterra sólo el ahora, nos aterra el no trascender. Nos aterra que sea esto nada mas y que el sufrimiento profundo que se nos cause no tendrá recompensa póstuma y que la alegría no sea causada por nada.

Esta semana me replanteé prioridades, decidí vivir mejor la vida. Decidí ser mas feliz, decidí no olvidar ser buena gente por ninguna causa. Pero hubiera dado mucho, por no tener que aprenderlo de esta manera...por no tener aprenderlo de esta manera.

Hermanas

A Isarellis
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Somos hermanas, no porque nos corre la misma sangre en las venas,
sino porque nos corren los mis sueños por todo el cuerpo.

Nos volvimos hermanas,
de repente,
un verano
y no nos quisimos de inmediato,
Pero entretejimos utopías, yo las pinte de verde y tu del arcoíris
y fuimos a la playa a mirar el cielo, a cuidar el mar y a inventar las olas.
Y surgió el amor.

Somos hermanas porque un día nos intercambiamos a Benedetti, a Pedro y a Sabina
y porque exploramos planetas desconocidos
y muchas veces esquivamos a Cupido.

Somos hermanas de tiempo, somos hermanas de anhelo, somos hermanas de intento…somos hermanas no porque nos corre la misma sangre en las venas sino porque nos corre la misma vida en la vida